domingo, enero 07, 2007

Dudar de la duda

“Dudar de la duda” es una frase que escuche de Víctor Hugo Visval, en medio de un entrenamiento en la escuela de sobre vivencia de mar y tierra de la Fuerza Aérea del Perú, al que asistí por el master en Coaching que lleve en la Universidad San Ignacio de Loyola. Cuando la dijo sentí que simplemente salio de el sin pensarlo, sin darse cuenta todo lo que significaba o por lo menos lo que significaba para mí.

Y por coincidencias de la vida tiempo atrás un gran amigo, que por otra coincidencia, es sacerdote jesuita me comento que Ignacio de Loyola dice que cuando escuchas a alguien hablar y de pronto una frase retumba en tu interior tanto que no puedes dejar de pensar en ello, es porque Dios te quiso decir algo con eso.

Luego de estos dos preámbulos si puedo decir que significo para mí, luego de tanto pensar, dudar de la duda. Sin embargo tengo que empezar por hablar de la certeza, en estos tiempos donde hay tanta información que no podemos tenerla toda para decidir, en los que las cosas cambiar tan rápido que no nos damos cuenta que cambiaron, en los que nosotros mismos no podemos seguir siendo iguales sino que tenemos que cambiar, mejorar y adaptarnos para seguir avanzando y seguir creciendo es imposible tener certeza, esto no quita que siempre tratemos de tener la mayor cantidad de información posible antes de decidir sin embargo cada vez más tenemos que dejarnos llevar por nuestro instinto, por esos 5/6 de no conciencia con los que convivimos y que tenemos que aprender a escuchar. Porque a pesar de que son 5/6 de todo lo que pensamos y sentimos no tienen esa voz que escuchamos en nuestras cabeza y que esta en la inteligencia racional (1/6) que habla y por tanto es más fuerte.

Qué ocurre entonces con la poca o mucha información que tenemos, la acomodamos, la usamos y en base a ella nuestra intuición nos lleva a tomar una decisión y nuestra parte racional que no cree en nuestra intuición nos hace preguntarnos ¿En verdad es eso posible? ¿Qué te hace creer que eso pasará? ¿Tienes alguna prueba de que esto funcionara?. Esta es la duda razonable, la que hace que nuestra parte racional se convenza de que nuestra intuición es correcta. Sin embargo cuando nuestra mente empieza a decir cosas como Y te dice cosas como: solo estas soñando; estas cometiendo un error; no tienes información suficiente para pensar eso; o la mejor de todas; espera un poco antes de decidir, esta duda es negativa porque e paraliza y no te deja decidir, deja de ser una duda razonable ante una decisión en algunos casos sin suficiente fundamente y niega a los 5/6 de la forma en que percibimos al mundo.

Es en este momento es que la frase dudar de la duda cobra sentido. Dudar de la duda es preguntarnos porque surgen estas frases paralizantes, porque no nos podemos lanzar a lo incierto, porque no podemos navegar en medio de la tormenta, por qué no nos animamos a pescar en aguas revueltas, es cuestionar aquella duda que no tiene sentido porque estamos tomando la mejor decisión que podemos, que muchas veces tiene su origen en el miedo o en el que dirán.
Es darnos cuenta que no podemos saber como será el futuro pero que tenemos que aprender a tomar las mejores decisiones que podamos con la poca información disponible que tenemos.

Por eso antes de empezar a dudar de las decisiones que tomamos pongámonos a pensar de donde salen esas dudas y dudemos de la duda